"Hará 400 años los españoles lo dejaron abandonado para asustar a los indígenas de éstas tierras", así lo relata José Rafael Orozco; desde entonces se le venera en Cot de Oreamuno. Tres meses antes del 13 de junio, comienza a recorrer las casas, donde es recibido con una pequeña oración, pernoctando donde le den las 8 de la noche. Los sábados en la noche es especial, pues hay vigilia.
Desde hace 10 años, cuando el Presbítero Manuel estaba en Paraíso, se propuso rescatar una tradición por muchos años abandonada: visitar Cot con San Antonio el domingo inmediato antes del 13 de junio, por el antiguo camino que comunicaba a ambas comunidades y que era utilizado para llevar y traer productos: de Paraíso se llevaban chayotes, bananos y yuca; de Cot se traían papas, zanahorias y cebollas.
Ya es todo un evento esperado por los dos pueblos, este año se adelantó porque el próximo domingo le corresponde a Paraíso celebrar la fiesta del Corpus Cristi. Por eso también el San Antonio Peregrino no llegó a Paraíso el sábado como es la costumbre, sino que Martín Méndez bajó con él el domingo bien temprano. A su lado, sonando la tradicional campana que anuncia la visita del santo, su hijo, que realizó todo el trayecto de Paraíso a Cot caminando, a pesar de su corta edad. Martín vino a tomar el relevo de muchos que por años fueron los responsables de organizar las visitas del Santo Peregrino, en su hijo tenemos a quien seguirá con la tradición.
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