27 de mayo de 2008
Rosa Pérez y Mónica Esteban son dos jóvenes cooperantes, colaboradora una en el Programa de Formación Ocupacional e Inserción Laboral (FOIL) y la otra en el Programa de Mejoramiento de la Calidad de la Educación (MECE, ambos de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Vinculadas por nueve meses a los citados programas, han aprovechado este tiempo para desarrollarse profesionalmente y en los fines de semana conocer nuestro país.
El pasado fin de semana se fueron al Volcán Rincón de la Vieja, en la Cordillera de Guanacaste, cuyo ascenso comenzaron por sí mismas a partir de las 8.30 a.m. Al medio día habían completado el recorrido. De repente, una espesa niebla comenzó a cubrir la cima del Volcán y pronto se encontraron con una visibilidad casi nula que les impedía encontrar los cúmulos de piedra que les indicaran el camino de regreso. Fueron dos horas de incertidumbre, aumentada en los pocos instantes en que se despejaba de niebla el lugar por la inmensidad del terreno que se ofrecía a sus vista, sin saber por donde emprender el regreso. El mantener la calma les permitió salir de ahí y ahora darse cuenta que actuaron imprudentemente pues no llevaban lo indispensable para enfrentar una emergencia: ni foco, ni fósforos, ni otra mudada, ni agua ni suficientes alimentos.
Recuerdan ahora que solo les pidieron el pago de la entrada al Parque y de ahí en adelante continuaban bajo su propia cuenta y riesgo; una irresponsabilidad también por parte de nuestras autoridades que no debe repetirse ni permitirse.
1 comment:
Bueno deberían andar con un guía, ya que si no se conoce puede ser peligroso, todos son responsables en algún grado de tal imprudencia.
Que no las agarro este monton de agua que ha caído.
Saludos
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