21 DE AGOSTO DE 2010
Llegamos casi al medio día. Estaba el anfitrión Juan Carlos Castro y Eduardo Chacón. Sobraba lluvia.
El de la comida y las bebidas no aparecía: Natanahel y no respondía el teléfono.
Para pasar el tiempo jugamos unos ping pong: primero a cinco minutos por jugador, quien pierde sale.
Y salía Chacón e ingresaba Juan Carlos, salía Juan Carlos e ingresaba Chacón, y salía Chacón e ingresaba Juan Carlos, salía Juan Carlos e ingresaba Chacón. Entonces las excusas: el mucho tiempo de no jugar.
A jugar con handicap de tiempo: ellos con cinco minutos y yo con tres. Y lo mismo: Y salía Chacón e ingresaba Juan Carlos, salía Juan Carlos e ingresaba Chacón, y salía Chacón e ingresaba Juan Carlos, salía Juan Carlos e ingresaba Chacón, hasta que ¡TAS! una "chaconeada", jugada ilegal de mi parte al no quitarme un jaque y ¡Chacón se comió el Rey".
A media tarde tuvimos que regresarnos mi esposa y yo quien me acompañaba, y a esas horas Natha sin aparecer.
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