ESCRITURAS EN LA CARPIO

7 DE FEBRERO DE 2013 Cuándo se hace tan poco, cualquier cosa, por mínima que sea, se presenta como un gran logro. Es el caso del Gobierno en La Carpio, con la entrega de 20 escrituras, de 5000 predios que deben escriturarse. O sea, un ínfimo porcentaje del 0.4%. Para las 20 familias es un gran logro, pasan de ser precaristas a propietarios. Pero lo que no sale a la luz pública, es que existen en el IMAS más de 50 expedientes, conformados con grandes esfuerzos por parte de las familias, muchos de ellos desde hace meses, y gracias el tesonero trabajo del Comité de Titulación y Vivienda del Barrio San Vicente, con la asesoría de FUPROVI, pero incluso algunos perdidos en el maremagnum burocrático de esa institución creada para ayudarle a los pobres. Lo que no se dice es que muchas familias han entregado todos los documentos exigidos para la escrituración una y otra vez, porque el IMAS los deja vencer. Y claro, en el IMAS, sentadas en un escritorio en Barrio Amón, para las funcionarias es muy fácil pedir la renovación de los papeles, olvidando que eso significa tiempo, dinero y sacrificio. Ojalá que al ir las autoridades gubernamentales a La Carpio a entregar las 20 escrituras (¿O están en éstas 20 las 3 entregadas a mediados del año 2012?) tomen conciencia de que esa es una comunidad ávida de respuestas prontas y oportunas, no solo para resolver el problema de tenencia de la tierra, sino también para resolver el problema del suministro del agua potable, la recolección y disposición apropiada de las aguas negras y pluviales, la construcción de aceras y de calles, de infraestructura en salud, educación y recreación, de conformidad con lo diseñado por FUPROVI en conjunto con las autoridades de los 9 barrios que conforman La Carpio e integradas en el Consejo de Desarrollo Comunal (CODECA). De los 12 mil millones de colones comprometidos para esas obras por el BANHVI con el Bono Comunal, a razón de 2 mil millones por año a partir del 2011, el rezago es de 3 años, pues aún se está a la espera de que se dé el banderazo de salida. ¡Ojalá y que cuando se dé no sea ya demasiado tarde. Hay comunidades muy pacientes, pero a veces no tanto! Sí señoras y señores.