14 DE NOVIEMBRE DE 2011

LA REMODELACION DEL PARQUE DE PARAISO Y LA CALZADA COLONIAL

Una serie de reacciones mayoritariamente positivas (tanto en facebook), como entre diversos sectores de nuestra sociedad (organizados o no organizados), generó nuestro anterior artículo: “Una remodelación del parque que ha debido esperar 31 años”.
Sin temor a equivocarnos, podemos afirmar que la iniciativa a ese respecto del señor Alcalde don Jorge Rodríguez y del Concejo, cuenta con el beneplácito de los paraiseños. Nos merecemos un parque que sea el núcleo central que propicie el encuentro y la integración a partir del realce de lo educativo-cultural (Escuela), lo religioso (Templo), lo político institucional (Municipalidad), la salud (Seguro Social), lo deportivo-recreativo (Gimnasio y zona de juegos infantiles), lo histórico (Casas de los Picado, Mata y Margarita Quesada) y de servicios (Banco y comercios).
Coincidimos con la Asociación Cultural Ujarrás (ACUJA), en el sentido de que si los restos del Benemérito de la Patria Florencio del Castillo aparecen y se ubican en el monumento que se construye en los terrenos del templo, la existencia del Mausoleo no se justifica, pero sí deben rescatarse sus murales internos y reubicarse. Coincidimos también, en el rescate para la memoria histórica y como legado de ejemplo para éstas y las nuevas generaciones de la figura de don Florencio y sus aportes todavía vigentes, resaltando para ello que la avenida central de Paraíso lleva su nombre y lo puede llevar el mismo parque. Eliminado el Mausoleo (A lo que con mazo en mano don David Valverde en una oportunidad manifestó que sería uno de los primeros en apuntarse para hacerlo), en su lugar debería construirse, apenas por encima de la superficie del Parque, para no afectar la libertad visual desde todos los extremos que debe tener, una especie de tarima circular de diez metros de diámetro, de no más de un metro de altura, y que a todo a su alrededor, hasta el suelo, mediante el aporte de artistas paraiseños, españoles y mexicanos, ilustre la trayectoria de Florencio del Castillo: su nacimiento en Ujarrás, su formación en Costa Rica y estudios superiores en León, Nicaragua, su desempeño como clérigo, su papel en las Cortes de Cádiz como diputado y Presidente y su trayectoria en México. En vista de que en 2012 se celebran los 200 años de la convocatoria y funcionamiento de las citadas Cortes, con las Embajadas de España y de México, con las autoridades de Oaxaca y Cádiz, y en el marco de las celebraciones de ese bicentenario, se puede impulsar este proyecto, liderado por la Alcaldía y el Concejo de Paraíso y con la asesoría de ACUJA, para darle financiamiento, seleccionar a los artistas que participen e inaugurarlo el próximo año.
Paralelo a estos esfuerzos, debe realizarse una labor investigativa para determinar si efectivamente, como me lo comentó en días recientes, en una amena conversación que tuve con la Profesora Miriam Quirós Quesada, la primera directora del Liceo de Paraíso y a quien le debemos que esa institución, de la que tantos nos sentimos orgullosos de haber sido sus alumnos, ocupe los terrenos donde se ubica actualmente (pero eso debe ser motivo de otras reflexiones), desde el mercado municipal (¿?) hasta la Municipalidad, existe una calzada colonial , como la que hay entre la Plaza Mayor y las Ruinas del Templo de Santiago Apóstol en Cartago, y de ser así, como podría rescatarse, por lo menos en los cien metros del costado norte del Parque, e incorporarla al proceso de remodelación.
Indagando al respecto, lo que es el destino, trajo a mi memoria que en el período 1990-1994, siendo el actual Alcalde, diputado, y luego de una visita que don Jorge hiciera a Oaxaca, México, he impresionado por la existencia calles que vienen desde la época colonial construidas a partir de piedras colocadas artística y artesanalmente, planteó y si mal no recuerdo incluso propuso que se destinaran recursos, para el rescate de dicha calzada.
O sea, que a partir de la iniciativa de la remodelación del Parque emprendida por las autoridades municipales, estamos ante la posibilidad de reencontrarnos con la historia, relanzando la figura trascendente de Florencio del Castillo, propiciando la existencia de un lugar de encuentro generacional para los paraiseños, y rescatando lo que debió ser el fruto del esfuerzo de muchos, al ir colocando artesanal y por qué no, artísticamente, una a una, miles de piedras para conformar la calzada que esperamos aún esté ahí, y si no está, que podamos reconstruir. ¡Todos estamos llamados a unirnos a esta obra! Que estas reflexiones sirvan para reencontrarnos como ciudadanos y organizaciones dispuestos a superar diferencias para construir un Paraíso mejor.
Paraíso, en la fría madrugada del 14 de noviembre de 2011.